Imagen 1.
Si hay una manzana asequible es sin duda la del amor, ésta nos lleva a los placeres y al conocimiento interior.
¡Qué delicia es paladear las doradas manzanas del jardín de las Hespérides; su néctar es la gracia sacra que nutre nuestro espíritu!
Riad
El Riad, ahí donde se comulga con lo sagrado, un canto a la unión, a la entrega y al saber morir en el otro para renacer a la gloria de nuestra esencia.
Le pido a Dios que el día que muera te sostenga el recuerdo de todo lo que vivimos, y apelo a tú espíritu, pleno, por mis actos hacia contigo.
Nos descubrimos juntos y nos fuimos definiendo con nuestras caricias, llenando y dando sentido a nuestra vida.
Caminamos juntos por la senda de la existencia, tú y yo, nosotros dos, como un ser nuevo y definido. No nos inventamos, damos sentido a lo nuestro; te amo... Eres mi destino.
He descubierto contigo los placeres del espíritu, lo sagrado de nuestras Almas. En tus ojos, he vislumbrado la luz de lo Eterno, lo perfecto de cada instante. En mi epitafio dirá: "Aquí yace el que descubrió el amor en el otro". Tú, el que me enseñó a amar a los demás, el que me hace sentir, vibrar y ser, por el que me descubrí; me das significado para vivir, pero también para morir.
Ahora entiendo aquello que dice, "algunas vidas están entrelazadas a través del tiempo, por un antiguo llamado que se escucha a lo largo de las eras... El destino".
¡Creo en el destino, que incluso los poderes del tiempo pueden alterarse para un sólo propósito!
El hombre más afortunado de esta tierra es aquel que encuentra... El verdadero amor; no renunciaría a un minuto de nuestras vidas juntos.
Entré tú y yo, sólo hay luz.
Imagen 2.
Sólo la humildad de querer ver la luz es el único camino posible para resucitar de entre los muertos.
Hay un abismo profundo muy cercano a la muerte donde despojados nos encontramos de toda humanidad, ahí nos encontramos ante las realidades más profundas de nosotros mismos, aquellas realidades que consideramos tan oscuras y lejanas a nuestra consciencia que ni siquiera podemos mencionar; mas sin embargo en este abismo habita "el rico", ante él nos encontramos indefensos, él nos dice la verdad, sus revelaciones son todo lo contrario a la oscuridad, y aunque nos aterra su discurso siempre es inequívoco.
Vencer a Cerbero es querer acercarnos al conocimiento más profundo de nosotros mismos. Las terribles y tangibles realidades que construimos, el terror, la duda, la incapacidad, todas ellas cabezas del can. La última prueba para lograr la inmortalidad, entendida ésta cómo la paz profunda.
Sólo el señor de la oscuridad con sus revelaciones nos puede armonizar, y así las potencias de nuestro espíritu se manifestarán; con tales secretos develados podemos derrotar al poderoso adversario, nosotros mismos.
Este trabajo lo dedico a mi sombra que
me ha hecho saber quién soy
Nota: Estén atentos porque no termina aquí, la siguiente semana ¡Hércules se ha vencido! y en honor a ustedes -mis lectores- una sorpresa más.
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El ejercicio de contemplación, correspondiente a la interpretación del trabajo de Hércules, lo pueden encontrar en:
Una vez en la página dar clic sobre el ángel.
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Fuentes
Imagen 1. http://foto-maniac2.tumblr.com/post/43309696668/seangomesphoto-auric-fixation-feat-michael
Imagen 2. www.wallpapershunt.com/tag/fantasy/d/2/
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